Jovenes brasileños acampan para ver al Papa en el campo del Corinthians
Centenas de jóvenes brasileños y extranjeros comenzaron desde hoy a acampar en las afueras del estadio Pacaembú de la ciudad de Sao Paulo, para esperar el encuentro que el papa Benedicto XVI tendrá con ellos mañana.
Grupos de jóvenes católicos de diferentes partes del país y algunos provenientes de naciones vecinas empezaron a llegar hoy al estadio, fortín del popular club de fútbol Corinthians y que será el escenario del encuentro entre el Papa y la juventud.
Unos 40.000 católicos se espera que acudan a escuchar el mensaje de Benedicto XVI, quien hoy inició una visita de cinco días a Brasil, la primera en calidad de Pontífice a Latinoamérica.
Algunos de los jóvenes montaron improvisados campamentos, con carpas de plástico, para afrontar la lluvia y el frío reinante en la capital paulista.
La líder juvenil Marcela Conrado, representante de un grupo de catequistas de la vecina ciudad de Limeira, comentó a Efe que 'a pesar de que nosotros estamos a apenas dos horas de Sao Paulo, quisimos adelantarnos un poco para el encuentro con el Papa'.
Agregó que 'es muy importante para la juventud brasileña y la del mundo que nos acompaña que el Papa haya programado este multitudinario encuentro. Para quienes no habíamos nacido cuando el (fallecido) papa Juan Pablo II vino por primera vez a Brasil (en 1980) será algo muy especial'.
Muchos de los jóvenes, agotados por horas de viaje desde sus lugares de origen hasta la capital paulista, prefirieron desplazarse con antelación al estadio Pacaembú que ir a la recepción del Papa en el aeropuerto de Guarulhos o acompañar su paso entre la base aérea Campo de Marte y el céntrico monasterio de Sao Bento, donde está alojado.
Para el encuentro con la juventud, los organizadores del evento instalaron un estrado de dos niveles, uno para el Pontífice y las autoridades religiosas y otro para los representantes de los jóvenes, ambos custodiados por una gigantesca paloma de 70 metros de alto.
El encuentro será transmitido en las afueras del estadio a través de pantallas gigantes, permitiendo que personas de diferentes edades que no fueron invitados por la Iglesia puedan observar el acto.
'Los jóvenes son el futuro y consideramos que este encuentro con el Papa fortalecerá mucho ese vínculo que se ha venido perdiendo entre juventud y religión. No queremos que los jóvenes de ahora busquen a Dios cuando tengan 40 años o más', expresó el sacerdote Marcos Cruz, quien está al frente de una delegación juvenil de Campinas.
Fuente: Terra.es
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