El Papa en Brasil provara la comida alemana

Un menú simple será servido al Papa Benedicto XVI durante su visita del 9 al 13 de mayo a Brasil, con base en comidas italianas y alemanas, sin especialidades brasileñas a las que no está acostumbrado, informaron ayer los encargados de preparar sus alimentos.

“El Papa es un señor de edad y nuestra preocupación es que tenga una alimentación nutritiva y sabrosa”, indicó la nutricionista Gisela Savioli, responsable de las comidas del Sumo Pontífice en Aparecida donde permanecerá del 11 al 13 de mayo.

Lo más típico brasileño que tendrá Bendicto XVI en su menú será guayabada (dulce de guayaba).

El Vaticano no divulgará el menú oficial del Papa, pero los cocineros revelaron que sus desayunos, almuerzos y cenas contendrán leché, café, panes, pastas, pescado, carne de res, verduras y legumbres, frutas tropicales, helados, budines, dulces de frutas y jugo de naranja, que es su bebida preferida.

En el Convento de San Benedicto, en Sao Paulo, donde el Papa se alojará del 9 al 11 de mayo, las comidas serán a base de carne y legumbres, señaló el chef Nixon Pereira de Souza.

“También tendremos pasta y comidas típicas alemanas, pero nada de 'feijoada' (plato tropical con base en frijoles y carne de cerdo que es el pan de cada día de los brasileños)”, explicó el prior del convento, Joao Evangelista Kovas.

El Papa comerá solamente en los lugares de alojamiento en Aparecida y Sao Paulo. Lo hará solo, asistido por una monja que habla alemán, y las explicaciones de los platos que servirse, con la descripcion de los nutrientes y calorías de cada alimento, que se le darán escritas en alemán.

“No obstante, podrá romper el protocolo y comer junto a los otros religiosos. Por eso no habrá diferencias en el menú del Papa y de los demás integrantes de su comitiva”, aseguró Savioli.

Mientras tanto, Aparecida aguarda sin perder su sencillez la llegada de Benedicto XVI.

A 165 km de Sao Paulo, Aparecida mantiene casi intactas las estrechas y desprolijas calles que conducen a su basílica, en donde el Papa inaugurará el 13 de mayo la Conferencia de obispos de América Latina y el Caribe.

La ciudad de 35,000 habitantes vive por y para su basílica, santuario de la virgen de Aparecida (la patrona de Brasil), a la que, según la Iglesia, llegan unos ocho millones de peregrinos anuales para agradecerle sus favores.

Fuente: Yucatán.com