sábado, 9 de diciembre de 2006

Benedicto XVI celebra a la Inmaculada en San Pedro


El papa Benedicto XVI celebró la memoria de la Virgen María junto a más de 20 mil personas en la Plaza de San Pedro del Vaticano al conmemorarse ayer la festividad de la Inmaculada Concepción.

Al bendecir a los peregrinos con la oración mariana del Angelus desde la segunda ventana de sus apartamentos personales, el Pontífice recordó que la vocación de la Virgen fue donar a Cristo al mundo y, dijo, ese mismo llamado lo tienen los cristianos en la actualidad.

“María no solamente no ha cometido algún pecado, sino que fue preservada incluso de la herencia común del género humano que es la culpa original, esto por la misión a la cual desde siempre Dios la destinó: ser la madre del Redentor”, afirmó.

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